«La Comisión Europea ha reconocido que la energía nuclear es necesaria, y tiene que formar parte del conjunto de fuentes, al menos durante la transición energética»

IGNACIO ARALUCE, PRESIDENTE DEL FORO DE LA INDUSTRIA NUCLEAR ESPAÑOLA

Textos: Matilde Pelegrí | Fotografías y video: Grupo SENDA

ENTREVISTA COMPLETA
La energía nuclear está de moda. El reconocimiento de la Comisión Europea de su papel necesario en la transición energética ha reavivado el análisis público de la importancia de esta fuente de energía.

Analizamos con Ignacio Araluce la actualidad del sector y los principales escenarios internacionales de presente y futuro.

LA ENERGÍA NUCLEAR, MÁS ACTUAL QUE NUNCA

El mundo se está enfrentando, desde hace dos años, a situaciones imprevistas. La pandemia, que obligó a un confinamiento nunca visto en el último siglo, permitió confirmar la excelencia de la industria y los profesionales del sector nuclear, que mantuvieron la operación de las centrales nucleares, garantizando así el necesario suministro.

Hace unas semanas, la Comisión Europea decidió incluir a la energía nuclear en la Taxonomía sobre mitigación y adaptación al cambio climático, considerándola energía necesaria para la transición.

¿Qué significa esta incorporación a la Taxonomía Europea?

La incorporación a la Taxonomía permite una financiación favorable a la energía nuclear, dando acceso a los fondos de financiación sostenibles.

Lo que significa fundamentalmente es que vamos a un objetivo de alcanzar la descarbonización en Europa en el año 2050. Es un objetivo muy exigente en la reducción de emisiones de CO2, no solamente en la generación eléctrica, sino en todos los campos, como la agricultura, la movilidad, el transporte o la calefacción.

En el caso de la generación eléctrica, la Comisión Europea indica que esa descarbonización se conseguirá mayoritariamente a través de energía renovable, fundamentalmente fotovoltaica, eólica, termosolar, además de hidráulica, y no sólo con la implantación de muchos parques, sino también avanzando en aumentar la capacidad de almacenamiento, con el desarrollo de baterías, de almacenamiento hidráulico, con la generación de hidrógeno para tenerlo como almacén y que después pueda revertir en el sistema, etc. 

Todo ello requiere de un desarrollo de años, pero hasta 2050 es necesario contar con otras fuentes de energía que completen el suministro necesario, energías a ser posible que no emitan CO2. Y claramente la energía que no emite CO2, que es masiva y da estabilidad al sistema es la energía nuclear. Por lo tanto, la Comisión Europea, de forma lógica, toma esa decisión de incluirla dentro de la taxonomía como una energía de transición.

¿Cuáles son las ventajas para la energía nuclear?

La más importante, sin duda, es el reconocimiento, por parte de la Comisión Europea, de que la energía nuclear es necesaria y, por tanto, que tiene que formar parte del conjunto de fuentes y hay que respetarla, por lo menos durante la transición energética. Eso es muy importante para el sector nuclear, porque esta energía ha sido muchas veces denostada exponiendo sólo lo que se consideraba negativo, pero nunca exaltando lo positivo.

La Comisión Europea ahora lo pone en su justo término. Primero, a través de comisiones técnicas ha dictaminado que la energía nuclear no causa, en el medioambiente, un daño mayor que otras fuentes incluidas dentro de la taxonomía. Y segundo, que da estabilidad al sistema eléctrico y no emite CO2.

¿Existen también ventajas desde el punto de vista de las inversiones?

Así es. Con esta decisión, la Comisión Europea reconoce que, si la energía nuclear es necesaria, hay que hacerla viable. ¿Y cómo se hace viable a la energía nuclear? Entre otras cosas, permitiéndole una financiación más favorable que otras energías que emiten CO2, dando acceso a los fondos de financiación sostenible. Esto se traduce en mayor facilidad para obtener créditos, y con mejores condiciones.

LA ACTUALIDAD

La actualidad más inmediata nos lleva a mirar hacia el este de Europa, y las consecuencias de la invasión de Ucrania por parte de Rusia.

Sin olvidar los terribles efectos en la población, es necesario analizar las consecuencias en el mercado energético y, por ende, en la economía. ¿Cuál es el análisis de Foro Nuclear en este asunto?

Estamos viviendo en un momento de cambio tremendo en toda la concepción energética y del mundo, porque la energía es uno de los pilares del desarrollo de la humanidad y todo lo que afecta a la energía tiene incidencia en el conjunto.

El escenario ya era totalmente diferente en las últimas semanas, y se ha complicado aún más con la invasión de Rusia a Ucrania. Estamos viendo en los mercados diarios eléctricos de todo el mundo, y en concreto de Europa, unos precios altísimos que eran impensables hace sólo unos meses. Y no sólo en los combustibles fósiles para el transporte, como la gasolina, sino también en el utilizado para la calefacción como el gas natural, además de la influencia del gas natural en los precios de la electricidad.

Es un momento de cambio absoluto y, en el caso concreto de Europa, con unas implicaciones especiales, por su dependencia del exterior, ya que no cuenta con fuentes de energía autóctona, y eso le hace vulnerable.

De hecho, en los foros de decisión se están haciendo cambios que se venían discutiendo desde hace diez años y ahora se están abordando en días o semanas. Por eso, Europa está decidida a dar los pasos adecuados para desvincularse de esa dependencia exterior, lo que significa dar un impulso a la transición energética, no solamente como elemento de lucha contra el cambio climático para hacer un mundo más sostenible, sino también para ser autosuficiente.

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