Sin complejos, sin ideología y con rigor. Esta es la petición que, una vez más, los profesionales de la industria nuclear han formulado ante el necesario debate sobre el futuro energético de este país.
Unos profesionales que, un año más, han evidenciado en la Reunión Anual de la Sociedad Nuclear Española, la 48, el músculo que tiene España en el sector nuclear y que, en estos momentos, es un activo con fecha de caducidad, condenado a desaparecer. Capacidad tecnológica, investigación, empresas y, por supuesto, personas con alta cualificación y formación, se han reunido por unos días en Toledo para compartir conocimiento, experiencia e innovación con la que abordar un futuro que, salvo en España, es sinónimo de crecimiento y de expansión.
En este foro se ha defendido la nuclear como energía sostenible y verde y se ha hecho, un año más, un esfuerzo relevante para que el mensaje y el discurso no se quede en el interior si no que llegue también a la sociedad, a la opinión pública mediante acciones de comunicación y de divulgación.
Los profesionales nucleares suscribimos las palabras pronunciadas por nuestro presidente, Emilio Mínguez, en la inauguración de este congreso afirmando que “las centrales nucleares españolas y las personas que trabajan directa e indirectamente en ellas somos un valor estratégico para nuestro país, un recurso joven y en forma, que está en perfectas condiciones para seguir ahí, dándolo todo, y queremos continuar haciéndolo”. “Si apagamos los siete reactores nucleares que nos quedan en funcionamiento en España perderemos mucho: una energía verde y sostenible, alto conocimiento tecnológico, desarrollo de tecnología propia, una industria que da valor al PIB y con proyección internacional y puestos de trabajo de calidad. A cambio, dejamos un vacío que, por mucho que lo intenten, no se puede esconder”. Así lo ha expresado el presidente de la Sociedad Nuclear Española y así nos hacemos eco de esta reflexión que nos gustaría hacer llegar al máximo de personas y, especialmente, a quienes están decidiendo cual va a ser el futuro energético de este país.
Disponer de garantía de suministro, a un precio competitivo y siendo respetuoso con los acuerdos de no emisión para contribuir a la lucha contra el cambio climático es, en cualquier debate serio que huya de complejos y de posicionamientos ideológicos, sinónimo de energía nuclear.
Tomar las decisiones correctas es fundamental para garantizar el bienestar hoy y en el futuro. España cuenta con nuestro compromiso de rigurosidad y profesionalidad en nuestros puestos de trabajo y una experiencia de décadas en la operación de centrales nucleares que son fiables, seguras y un activo de altísimo valor para este país.
